REDACCIÓ PALMA, 31.10.2017. Y lo hace con la exposición “Andreu Maimó. Cuando el arte restaura la memoria”, que reúne una vuitantenta de piezas de la obra más reciente del artista felanitxer. Maimó expone por primera vez en el Centro Cultural la Misericordia en una muestra organizada por el Departamento de Cultura del Consell de Mallorca y comisariada por Guillem Frontera, que se inaugura este jueves, 2 de noviembre.
“Soy un gran enamorado de mi trabajo. Observo mi entorno para poder contar cosas”. Así se define Andreu Maimó a los 71 años, después de una larga vida dedicada al arte. La pasión por la naturaleza ha marcado su obra, con especial predilección por las higueras desnudas en invierno y por las heridas que la mano del hombre deja en viñas, raíces, troncos… Trabajador incansable, “hago trabajo todos los días del año”, asegura que sus obras “pueden parecer sencillas pero son muy complicadas”. A lo largo de su trayectoria artística ha cultivado diversidad de disciplinas: la litografía, el grabado y xilografía realizadas al taller Can Viento, en Felanitx, así como pintura, escultura y estructuras cerámicas.
Ahora una vuitantenta de piezas producidas por Andreu Maimó desde el año 2010 hasta la actualidad se abren a la capilla del Centro Cultural la Misericordia y a la sala multiusos de la tercera planta del edificio.
“Hace un año que tenemos en mente esta exposición” ha explicado el vicepresidente primero y consejero de Cultura, Francesc Miralles: “es un proyecto especial por la persona que lo representa pero también por el contenido, que habla de la natura, de foravila, del contacto con la tierra y con nuestro entorno…son cuestiones con las cuales me siente muy reconocido. También estoy contento que esta muestra contribuya a ampliar la trayectoria consolidada de Andreu Maimó: habrá mucha gente que sabrá reconocer su obra por sus características pero también por su calidad”.
No se trata de una exposición antológica ni de una muestra retrospectiva sino, más bien, de la presentación en sociedad de la obra de toda una vida que transita por diferentes temáticas: higueras, viñas, cepos y rapas, granadas, piñas e higos, retratos y autorretratos. “Su mundo son estos elementos”, añade Guillemos Frontera, comisario de la exposición, “objetos que descubre, empieza a estudiarlos y los trabaja convirtiendo su trabajo en un ambicioso proyecto de exploración. Sus obras no se repiten. Estambre ante un artista único, singular, un trabajador constando que se manifiesta con todas las herramientas que tiene a su alcance”.
La muestra se inaugura este jueves, 2 de noviembre, a las 20 horas a la capilla del Centro Cultural la Misericordia, donde se podrá visitar hasta el 15 de diciembre.